¿Recibe información periódica de las cuentas de su comunidad y de las mejoras realizadas?
¿Tiene claros todos sus derechos y obligaciones cuando va a contratar a un trabajador?
¿Sabe en qué situación están sus procesos judiciales en todo momento?
¿Conoce realmente los datos de su empresa y los utiliza en la toma de decisiones?
¿Se siente solo cuando necesita negociar con su banco?